El nuevo divorcio notarial
¿Cómo se tramita el nuevo divorcio notarial? ¿Qué ventajas e inconvenientes plantea respecto del divorcio express? ¿En qué casos está permitido? ¿Cuánto cuesta y cuánto se tarda en conseguirlo?
La ley de jurisdicción voluntaria 15/2015 instaura la posibilidad de divorcio notarial. Es esta una importante novedad que permite evitar pisar los juzgados para divorciarse, y realizar todos los trámites en la notaria. Pero: ¿qué ventajas e inconvenientes tiene el divorcio ante notario?
Vamos a tratar los puntos más relevantes en este artículo.
¿En qué casos se puede realizar un divorcio notarial?
No todos los divorcios se pueden tramitar ante notario. Sólo aquéllos en que no existan hijos menores o incapacitados. A sensu contrario, podrán optar por esta modalidad los divorcios de mutuo acuerdo en aquellas parejas sin hijos o con hijos mayores de edad y que no están incapacitados.
Asimismo, si en el divorcio se tuvieran que dilucidar cuestiones económicas que afectaran a los hijos, éstos deberían ser escuchados. Asimismo, si el notario entiende que los acuerdos de los cónyuges perjudicaran el patrimonio de los hijos, podrá no dar trámite al divorcio.
¿Qué tramites son los habituales?
Los cónyuges deberá dirigirse a un notario que tenga su despacho en el municipio del último domicilio de la pareja, o bien en uno de los que en la actualidad cada uno tuviera su residencia en ese momento (si ya están separados de hecho). Se deberá aportar el certificado de matrimonio y -de haberlos- los certificados de nacimiento de los hijos (mayores, obviamente)
Los cónyuges deberán firmar un convenio regulador en que queden fijadas las cuestiones relevantes de su ruptura. El notario procederá luego a la inscripción del divorcio en el Registro Civil correspondiente.
¿Qué requisitos se precisan en este tipo de divorcios?
Hay dos puntos que conviene tener en cuenta cuando se opta por un divorcio notarial:
- Los cónyuges deberán realizar los trámites de manera presencial. Esto es, deberán acudir ambos a la notaría y firmar en su propio nombre. Por lo tanto, en caso de que uno de los dos esté por ejemplo en el extranjero no cabría llevar a cabo los trámites mediante poderes.
- Asimismo deberá está presente en toda la tramitación un abogado en ejercicio, a fin de velar porque ambos cónyuges sean conscientes de los derechos y obligaciones que asumen en base al convenio regulador.
¿Cuánto tarda un divorcio ante notario?
La ventaja del divorcio notarial ante uno tradicional (el comúnmente conocido como divorcio express o de mutuo acuerdo) es que aquél es más rápido. De hecho, si los cónyuges acuden a la notaría con el convenio regulador redactado y acompañados de un abogado de su confianza, ese mismo día pueden obtener el divorcio (meramente a expensas de que el mismo se inscriba como nota marginal el el Registro Civil)
Por su parte, un divorcio judicial de mutuo acuerdo viene tardando entre uno y dos meses desde la interposición de la demanda hasta la obtención de la sentencia.
¿Cuánto cuesta un divorcio notarial?
Si la rapidez en la tramitación es uno de los pros más importantes para optar por el divorcio ante notario, el precio sería uno de los contras más relevantes. Y es que el divorcio notarial conlleva pagar los intereses del notario y del abogado que ha de acudir con nosotros a la firma del convenio.
Cierto es que en este tipo de divorcios nos «ahorramos» la minuta del procurador, pero ésta suele ser bastante más baja de la que nos presentarán los otros dos profesionales implicados en un divorcio ante notario.
Los precios pueden variar de manera ostensible en función de la notaría y el despacho jurídico que contratemos. Los notarios con los que trabajamos suelen pedir unos 200 euros (siempre que el divorcio no implique liquidación de bienes), a los que se adicionarán los 300 euros que cobramos nosotros por la redacción y negociación del convenio y la asistencia a la notaría.